Y EL QUE TERMINÓ AYUDANDO AL PRECIOSO FUE...

No cabe duda que en México quien realmente termina solucionando todos los problemas, crisis, conflictos, homicidios, violaciones, traumas, guerrillas y mil etcéteras más, es el omnipresente TIEMPO.

Y a él enfocó todas sus baterías el precioso.

El infeliz sabía perfectamente que, si llegaba 'vivo' al mundial, el escándalo se reduciría notablemente; pero no creo que haya imaginado, ni en sus más guajiros sueños, que iba a ser ayudado aún más por el candidato presidencial que se volvió su implacable perseguidor: López Obrador.

El conflicto post electoral se recibió como oxígeno puro en Casa Aguayo. Los medios tradicionales se olvidaron de la canallada cometida contra Lydia Cacho; hicieron a un lado al pederasta Succar Kuri, a su compadre Kamel Nacif y al héroe de esta película, y le dieron seguimiento a la toma del zócalo y a las asambleas convocadas por el perdedor. Los ciudadanos también prefirieron dejar un poco de lado al precioso para estar pendientes de quién será nuestro próximo presidente y de cómo destruyeron el congreso estatal los maestros oaxaqueños.

Pero el tiempo es implacable y, cuando te alcanza, ya no hay nada que hacer. Puede ser que a México se le hayan olvidado tus "hazañas", pero no a todos...

En efecto, mi gober precioso, el tiempo te ha alcanzado y te ha dejado en la lona. Tu carrera política ha muerto. Quizás sea eso lo más importante para todos aquellos a quienes ofendió tu infame colaboración con el protector del pederasta Succar Kuri, Kamel Nacif.

Igual y te salvas y la Corte te exonera, dada la manera tan puñal en que te bajaste los calzones frente a Espino. Pero, entiéndelo bien: estás políticamente muerto; apestas desde hace meses.

Yo nomás te digo una cosa, wey: ni creas que te voy a dejar en paz... Eres inolvidable, papá.